Con un poco de azucar…

Publicado el 17 abril 2015

by Bárbara.

…esa píldora que os dan, la píldora que os dan pasará mejor…

Así es como tengo que ponerme cada vez que mis hijos tienen que tomar alguna medicina ¡a cantar! Ni Apiretal ni Dalsy, las dos cosas es un verdadero drama dárselas. Debe de ser genético porque a ninguno de los 3 les gusta. En el cole siempre escucho » mi hijo el Dalsy se lo bebé del bote, o el sabor a fresa del Apiretal les chifla» Vamos, que me cuesta creerlo 😉

Con cuchara, con jeringuilla, agarrandoles, en jarabe, en pastillas, aplastándolas y…nada.

Menos mal que se ponen pocas veces enfermos porque sino yo no sabría muy bien gestionarlo.

jarabe 2

Así que últimamente estoy utilizando la tactica Mary Poppins. Encontré esta descarga que podéis conseguir aquí y la imprimí en cartulina. Luego cogí una cuchara de madera y puse pegado un caramelo.

Ahora cada vez que se tienen que tomar su medicina al lado del bote les pongo su cuchara de madera con su chuche.

jarabe 0

jarabe 1

Y…¡parece que van mejorando! Por lo menos tienen la motivación de que cuando se tomen su cucharadita de puagggg como dicen ellos luego tendrán una pequeña recompensa.

Tácticas que usa una madre en apuros ;-).

Se pasa tan mal cuando están malitos… ¿que hacéis vosotros?

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4 Comentarios

  1. Mi versión es la chocolateada, siempre una onza de chocolate después de la medicina. Pero claro, eso sirve para cuando es de tomar… Que la mía es muy valiente para todo menos para el Betadine y ya no te cuento si nos clavamos alguna astilla o algo así…
    Estoy encantada con el blogroll este, es tan fácil seguiros ahora y comentaros… 🙂

    • jajajaja lo del Betadine ni idea mis hijos van directamente a la brecha no pasamos pro el raspón ;-(

  2. Yo de pequeña odiaba el Dalsy… Hasta el punto que un día lo escondi arriba de la nevera, cuando mi ponre mamá buscaba y buscaba se subió a una silla plegable a ver arriba de la nevera, se cerró y se cayó, haciéndose una brecha en la ceja y las dos corriendo al hospital… Desde ese día creo que no volví a protestar… Eso sí, mi mami siempre me daba un huevito de choco después de la medicina.

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